En 1831 se descubre que en la costa asturiana, en la zona de Arnao hay un yacimiento de carbón, submarino en su mayor parte, pero de gran rentabilidad.
En 1833 se funda la Real Compañía Asturiana de Minas de Carbón, de capital belga y con participación española. Comienza la extracción profesional de carbón.
La mina vería la creación de industrias, vías férreas y electrificación durante las décadas siguientes en sus alrededores.
Los problemas comenzarían en 1903 cuando el agua del mar comenzó a entrar en las galerías, siendo el final de la mina en 1915, cuando una inundación importante obligo a cerrar barias galerías.
El conjunto de la mina tenía varios edificios anexos, casino, escuela, talleres, castillete… fueron transformados posteriormente en un Restaurante. Actualmente se encuentra en un estado de semi-abandono, esperando que se lleven a la realidad los planes de rehabilitación y conversión en museo de la minería.
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